Tití.

Fuiste una gran parte de mi durante casi toda mi vida...

Lluvia. Nosotros. Amor.

Quiero una noche lluviosa. Contigo. Con tus abrazos y tus besos. Que me cojas y sonriamos. Que me vuelvas a besar. Y que no acabe nunca. Quiero una noche lluviosa. Juntos. Que tengamos el paraguas en la mano y la lluvia caiga. Que el paraguas acabe en el suelo fruto de nuestros besos. Mojándonos. Ajenos al mundo. Amándonos. Que me vuelvas a besar. Y que me digas que me amas. Quiero una noche eterna. Lluvia. Nosotros. Amor. Quiero olvidarme de todo. Quiero decirte que me tienes a tu lado. Que me abraces más y más. Que lloremos de felicidad y a la vez melancolía. Que la lluvia confunda nuestras lágrimas. Lágrimas de amor. Quiero que caigan las gotas al compás de nuestro corazón. Miradas en la oscuridad que brillan más que las estrellas. Estrellas, sí. Quiero una noche estrellada. Lluviosa pero estrellada. Quiero una noche de constelaciones en nuestros sentimientos. De caricias en el cielo. Fuegos artificiales en nuestro interior.
Quiero una noche lluviosa. Contigo. Con tus abrazos y tus besos. Que me cojas y sonriamos. Que me vuelvas a besar. Y que no acabe nunca. Quiero que corramos por las calles desiertas. Solitarias y mojadas. Pisar los charcos contigo, y reír nuevamente. Una noche preciosa. Dos corazones fundidos para siempre. Sonido de lluvia. Y de fondo una canción.

Entonces lloramos. Nos besamos y abrazamos. Lágrimas y sonrisas coordinadas. Miradas. Nos amamos. Y llueve.

Dime que mis labios son tu droga.

Dime que mis labios son tu droga. Porque para mí tu boca es un manjar.

Dime que mis besos son tu azúcar. Porque cariño, a mí los tuyos me hacen volar.